Marlene Dietrich: un ícono inolvidable.
Marlene Dietrich, una mujer que rompió esquemas y se abrió paso en el mundo cinematográfico gracias a su gran talento. Es recordada por su participación en películas como Marruecos (1930), El expreso de Shanghai (1932), Blonde Venus (1932) y El Diablo era mujer (1935).
Pero Dietrich no resaltó exclusivamente por su gran desempeño como actriz sino también por romper con los esquemas tradicionales de feminidad, pues uso un esmoquin y un sombrero de copa para interpretar a una bailarina de cabaret. Posteriormente siguió usando prendas consideradas de uso exclusivamente masculino fuera de la gran pantalla.
Siempre fue muy crítica con la llegada de Hitler al poder. Cuando Goebbels intentó que regresara a Alemania para convertirla en estrella del cine del Reich, ella se negó. “No, jamás podría volver a mi país mientras semejante hombre fanatice a las masas”, dijo, y pidió la nacionalidad norteamericana. Hasta la caída del muro de Berlín no volvió a sentirse berlinesa, admitió.
“La muerte es algo que a ti no te concierne, Marlene, tú eres inmortal”. Así ha sido.